El pasado 04/06/2014 el diario El Mundo publicaba un artículo de nuestro CTO, Daniel Díez, titulado Pagos en movimiento. Os lo dejamos a continuación:

Pagos en movimiento

Hace más de medio siglo los pagos en metálico dejaron sitio al «plástico» de las tarjetas. Las tarjetas ofrecen mayor seguridad, ocupan poco espacio y su aceptación casi universal las ha convertido en indispensables. Quizás la mayor ventaja (y peligro) es la posibilidad del crédito. El fraude ha sido un problema recurrente que ha hecho mejorar su modelo con seguros y terminales online. A pesar del desarrollo tecnológico es difícil encontrar alternativas más adecuadas. El coste para el usuario suele ser una cuota anual y para el comercio el contrato, los terminales y las comisiones.

La complejidad del ecosistema hace difícil encontrar un modelo eficaz, seguro y barato de pago.

La nueva ola de pagos con el móvil está en pleno desarrollo. La solución parece evidente por el uso personal e intensivo que hacemos del móvil. Hay países con soluciones populares. En España su uso en pagos sigue siendo muy reducido, si bien las nuevas iniciativas y apps llenan la prensa. La extensión global del teléfono móvil hace a los más de 7 millardos de usuarios activos potenciales usuarios de pagos; esto teniendo en cuenta que solo hay 1.3 millardos de cuentas de crédito o débito globales. Pero la oportunidad real para iniciativas en países desarrollados es monetizar los datos de comportamiento de usuario para activar el consumo.

Los modelos más frecuentes usan los mismos actores que las tarjetas (bancos y emisores), además de los tecnológicos: móvil, sistema operativo, aplicación y operadora móvil. La complejidad del ecosistema hace difícil encontrar un modelo eficaz, seguro y barato de pago.

Algunos piensan que es una solución en busca de un problema. Hay sin embargo iniciativas tecnológicas (wallets, P2P, NFC, cloud) que están revolucionando los pagos en algunos sectores. Un ejemplo de pagos «en movimiento» son los dispositivos de telepeaje mobe. Se instalan en el coche y permiten el pago «sin parar» de los peajes en las autopistas.

El modelo usa un estándar europeo que en España llamamos VIA-T. Se accede al servicio con el móvil o por web.

La novedad es su uso creciente en parkings; la barrera se abre y el pago es instantáneo. Además, el operador del parking se alegra de usar método de pago más barato.

Fuente: El Mundo